La taruka, el albatros, el tiburón azul y la rana verde, entre otras veintinueve especies, son las retratadas en el libro “Fauna chilena amenazada: 32 especies para conservar”, publicado en julio del año pasado.
“Fauna chilena: 32 especies para conservar” es el primer ejemplar de una serie de tres tomos que pretende presentar un total de 100 especies chilenas clasificadas bajo alguna categoría de amenaza a su sobrevivencia en este lugar del planeta. Este compendio fue realizado por Photosintesis, una consultora orientada a la asesoría ambiental, que además posee un área editorial, donde divulgan información científica, poniendo el énfasis en la colaboración interdisciplinaria para alcanzar grandes objetivos.
Todo nació a mediados del año 2014, cuando realizaron su primer proyecto -una investigación en el cerro Poqui (Altos de Cantillana, VI Región)-, el cual les dio el impulso para echar a andar una iniciativa más grande: Photosíntesis.
Natalie Pozo y José Gerstle, ambos del área de de proyectos editoriales, cuentan a Revista Endémico que, desde ese año, comenzaron a lanzar libros: “Primero, hicimos uno para una empresa, y con eso financiamos el primero de tres tomos de nuestro proyecto editorial de las 100 especies, y de a poco hemos ido avanzando”. Actualmente, están haciendo una revista y otros tres libros; y, permanentemente, venden ilustraciones y fotos de distintos artistas.
En equipo, se puede ser más creativo:
Natalie y José dicen:
“Hoy en día existe una comunidad de jóvenes profesionales que se han interesado por la naturaleza desde diferentes acercamientos. Existe un denominador común que es mostrar la belleza, valor e importancia de las especies”.
Y lo dicen con conocimiento de causa, pues este libro es una mezcla entre el mundo científico y el artístico, producto del trabajo colaborativo realizado entre varios investigadores, fotógrafos (as), ONGs e ilustradores (as) que se dedican constantemente a proyectos ligados a la conservación de la naturaleza.En este aspecto, Photosíntesis como editorial lo que hizo fue conectar todas las iniciativas, conocimientos y habilidades, para materializar una recopilación de la fauna chilena en peligro de extinción. “Fue un proceso intenso y muy lindo. Lo mejor fue cuando tuvimos el libro en nuestras manos, y cuando la gente nos comentaba cuánto le gustó el proyecto”, cuenta Gerstle.
En aquel procedimiento pudieron observar diferentes tendencias que ponen en peligro la estabilidad de los organismos más frágiles. Entre ellas, la más común es la pérdida de su hábitat natural, lo cual se produce por distintas razones, entre las que se encuentra el desarrollo poco sostenible y mal planificado. Otras causas que observaron muy frecuentemente, son el daño que causan las especies introducidas, la sobre explotación, la caza ilegal y el cambio climático.
La conservación de especies para Chile:
Ante la consulta de qué tan efectiva les parece la conservación en el país, los emprendedores señalan que “aún es un tema que está creciendo en conocimientos y difusión, debido a que el contacto con áreas naturales para muchos chilenos y chilenas es indirecta o casi nulo”.
En Chile, un 38% de la población se concentra en el área metropolitana del Gran Santiago. Esto genera que exista un vínculo indirecto entre la naturaleza y los ciudadanos, y por tanto, más desconocimiento de los animales y sus entornos.
La opción que el equipo editorial ha tomado para propagar este llamado a la conservación y respeto del entorno -que a veces parece desconectado de la urbanización, pero, al contrario, le está estrechamente relacionado- ha sido mostrar fotografías e ilustraciones que puedan atraer a más público. Natalie Pozo, coordinadora de proyectos editoriales señala que “el arte es una herramienta muy potente para sensibilizar y dar paso a transmitir información sobre lo que les sucede a las especies”.
La crítica al Estado:
El Estado chileno, a través del Ministerio del Medio Ambiente (MMA), se mantiene activo en temas de conservación al impulsar estudios y Planes de Recuperación, Conservación y Gestión de Especies, que logran concretar conocimiento a nivel global sobre la conservación de la fauna endémica. Sin embargo, existe la constante contradicción con el resto de instituciones y planificaciones que se abanderan por el crecimiento indiscriminado, el progreso y el desarrollo de la sociedad, sin tener como valor intrínseco la sustentabilidad de las áreas naturales.
Ante ello, realizar alternativas que eduquen a la sociedad desde la vereda alternativa son necesarias, pero no siempre suficientes. Desde Photosíntesis, Natalie Pozo señala que la protección de especies “es un tema en el que difícilmente se alcanzarán objetivos sólidos si no se concibe el daño al medio ambiente. Hace falta incorporar fuertemente el concepto de sustentabilidad tanto en la educación como en las decisiones políticas y económicas que se toman”.
Mientras los gobiernos no lleguen a realizar ese trabajo, es menester ciudadano innovar, fotografiar, escribir y difundir iniciativas tales como Photosíntesis, un emprendimiento que contribuye a construir un sistema más amigable con el entorno natural.
*Puedes adquirir el libro a través de la tienda de Nat photo (online), Ladera Sur (online), Tiendas Rockford, o visitando este link que te llevará a la página web de la editorial.