Interseccionalidad: Reconocer que la crisis climática no afecta a todos por igual

La interseccionalidad es un concepto que nace en el hemisferio norte para hablar de cómo la justicia ambiental está intrínsicamente ligada a temas de raza, clase, género, religión y territorio. Surge desde movimientos activistas y de la academia para visibilizar que cuando se trata de reclamar derechos por el medio ambiente, quienes menos se toman en cuenta en sus quejas y propuestas son las comunidades que históricamente han sido más desplazadas y vulnerables a estos problemas: personas de color, de bajos ingresos, mujeres, comunidades indígenas, habitantes de países en desarrollo. Al mismo tiempo, quienes más tribuna obtienen son las entidades protagónicas que desde siempre han representado la hegemonía del Norte global.
Joycelyn Longdon es activista y académica, fundadora de la plataforma Climate in Colour. ©Climate in Colour

La urgencia de la crisis climática y la revelación de que quienes más contaminan el planeta son los que más voz y poder logran en torno a la discusión por la justicia ambiental, ha provocado que múltiples diversidades del mundo alcen la voz para representar a minorías y comunidades desplazadas en la discusión por el medio ambiente. Ellas son las que más se han visto afectadas por el extractivismo, la contaminación industrial, el desplazamiento por desastres naturales, entre otros eventos que cada vez experimentamos con más frecuencia.

Si bien en Chile este movimiento aun es incipiente, podemos encontrar importantes huellas de movimientos interseccionales en los movimientos feministas que surgieron en la década del 60 y 70. En ese entonces el tema ambiental no tenía en Chile la tribuna que tiene ahora, pero bien es cierto que marcó un antecedente crucial para comenzar a hablar de interseccionalidad y multiplicidad de voces a la hora de quién puede tener vitrina para hacer activismo.

Entender la Tierra como un ente diverso y que requiere de la colaboración de todos los seres que lo habitan para regenerarse implica un activismo ambiental que sea interseccional. Solo así será posible alcanzar la verdadera justicia ambiental aquí y en todo el planeta.

La actual Constitución de Chile de 1980 sigue siendo un obstáculo para una efectiva justicia ambiental, puesto que, si bien en su premisa está garantizar “el derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación”, en la realidad esto se vuelve impracticable, ya que las normas constitucionales priorizan la explotación del territorio y de las comunidades que lo habitan. A ojos de la actual constitución, estos son vistos como recursos, materias primas o insumos productivos. El medio ambiente existe para explotarlo, y las regulaciones son insuficientes para asegurar su protección real y efectivo cuidado, limitando a su vez la participación de comunidades que se ven afectadas por las decisiones en el uso de los recursos, privilegiando los intereses de quienes desarrollan actividades de explotación.

Los movimientos interseccionales provenientes de la misma ciudadanía son fundamentales para divulgar la necesidad de un sistema legal que es ineficiente e injusto con el planeta. Se trata de colectividades que, desde distintas aristas y disciplina, rechazan todo acto de discriminación. Entender la Tierra como un ente diverso y que requiere de la colaboración de todos los seres que lo habitan para regenerarse implica un activismo ambiental que sea interseccional. Solo así será posible alcanzar la verdadera justicia ambiental aquí y en todo el planeta.

Te invitamos a visitar el Glosario para Antropoceno sobre Interseccionalidad que creamos en Endémico (haz clic en la imagen) ©Endémico

A continuación te presentamos algunas agrupaciones que han inspirado a Endémico en la construcción de una cultura creativa medioambiental que sea diversa y plural. Muchos de ellos abren sus plataformas generosamente para ofrecer interesantes recursos educativos que desde ya puedes comenzar a integrar a tus propios activismos. Una invitación a transformar nuestras causas socioambientales en movimientos realmente justos y equitativos con todos los seres que habitan este planeta.

Climate in Colour: salir del racismo institucionalizado en el escenario climático

Joycelyn es una mujer negra que vive en Londres y que fundó este centro de recursos en 2020, como resultado de sus estudios de postgrado. Ella quiso aprovechar sus habilidades académicas y herramientas de diseño para crear información que fuera accesibles y empatizara con personas fuera de la esfera académica. Su sitio web es una fascinante experiencia interactiva que a través de gráficas y animaciones que nos enseñan la inevitable intersección entre ciencia climática, diversidad y vida sustentable. “Mitigar la crisis climática y sanar a nuestra Tierra requiere de reparaciones hacia las personas negras, porque la degradación del medio ambiente es inseparable de los cuerpos negros”, dice Teju Adisa-Farrar, una de las invitadas a una de las ediciones de Climate in Colour. Otra de las frases que inspiran y aclaran esta problemática es de Cullors y Nguvu, del movimiento Black lives matter. “El racismo es endémico de la desigualdad global. Esto implica que los más afectados por la crisis climática son personas negras (BIPOC*) y pobres.”

Algunos de los recursos educativos de Climate in Colour explican el problema de la gentrificación y la crisis climática. ©Climate in Colour

En sus tutoriales de video, podrás ver inspiradoras charlas sobre racismo ambiental y el impacto desproporcionado que las amenazas ambientales tienen en personas de color, como también cronologías sobre historia del clima y el colonialismo, para volver a las raíces de nuestra crisis climática. Pero también propone soluciones: ella habla, por ejemplo, de una reparación climática donde se asume que las naciones ricas han producido la mayor parte del cambio climático y deben hacerse responsables de pagar a los países en desarrollo una compensación por el daño que se les ha hecho.  La clave, como siempre, es cómo movernos a un mundo más verde que sea también más justo¡

*Black, indigenous and people of color (Negros, indígenas y gente de color)

@climateincolour

Latinas for climate (L4C): la crisis climática es un asunto de género

Material educativo de Latinas for Climate ©L4C

Es una organización de jóvenes latinas luchando por la justicia climática interseccional. Surgen en 2020 luego de la campaña global por el Acuerdo de Escazú y siguen trabajando juntas ante la necesidad de hacer un activismo interseccional por la justicia climática en Latinoamérica y el Caribe. Hoy son más de 100 integrantes que buscan crear conciencia sobre la crisis climática con una perspectiva de género, de derechos humanos y de latinidad, para poder educar a niñas, jóvenes y mujeres de la región latinoamericana en este tema para que se empoderen y comiencen a tomar acción por un mejor futuro.

Algunos de sus espacios de conversación para aprender sobre la crisis climática de manera interseccional son los “Miércoles con M de mujer”, donde presentan las diversas experiencias de mujeres luchando por el cambio social, eventos de liderazgo femenino juvenil en torno al cambio climático y activismo para detener presiones extractivistas en distintos puntos de Latinoamérica, como la actual lucha para detener el ecocidio que representa el futuro tren maya en México

@latinasforclimate

L4C se ha preocupado de posicionar y reconocer el trabajo de mujeres activistas latinoamericanas, como Nemonte Nenquimo. ©JERONIMO ZUÑIGA/AMAZON FRONTLINES

Black girl environmentalist: Una comunidad de apoyo para mujeres negras y activismos no binarios

El objetivo principal de Black Girl Environmentalist es crear una comunidad de apoyo intergeneracional de niñas negras, mujeres y ambientalistas no binarios. Al empoderar a estas comunidades históricamente invisibilizadas y vulnerables, Black Girl Environmentalist busca abordar el problema de la vía y la retención en el movimiento ambiental a través de una rica programación y tutoriales curados por y para negros que no sean hombres. Al hacerlo, buscan ayudar a cultivar un movimiento ambiental hecho a la imagen de la comunidad negra.

Algunos de sus encuentros destacados han sido talleres de escritura para enfrentar la ansiedad ambiental y talleres de poesía en espacios al aire libre. También realizan investigación y gráficas para retratar y rescatar a personajes emblemáticos en el activismo negro, como Harriet Tubman, scout, enfermera, espía e importante ambientalista que escapó de la esclavitud en Estados Unidos.

@blackgirlenvironmentalist

Estos perfiles de mujeres negras activistas son parte del trabajo de investigación y gráfico que hace Black Girl Environmentalist. ©blackgirlenvironmentalist

Pattie Gonia: El senderismo es drag

Pattie Gonia es una drag queen ecologista y activista de equidad al aire libre. Su trabajo gira en proponer soluciones ambientales desde la mirada gay, donde deconstruye la corporalidad y vestimentas con que típicamente asociamos el mundo outdoor. Por eso, Pattie Gonia sale a hacer senderismo con tacos de más de 15 cm, o con una bata colorida que ella misma ha creado a partir de desechos plásticos recogidos.

Pattie Gonia, diva queer del outdoor que ha conquistado un espacio que estaba rezagado en el activismo ambiental. ©Hannah Shea

Algunas de sus performances más emblemáticas han sido recrear una versión ecológica de The Sound of Music sobre el cambio climático, patinar en hielo como drag, escalar el valle de Yosemite con peluca y botas largas de cuero junto a Alex Honnold, y convertirse en su propia mascota felina. Todo esto sobre sus tacones altísimos, con tal de llamar la atención sobre el calentamiento global y sacar a las comunidades que sistemáticamente han sido excluidas de la conversación ambiental. Pattie Gonia nos recuerda que el estar en la naturaleza no es un privilegio exclusivo del mundo outdoor de chaquetas impermeables, bototos y masculinidades bravas que solemos asociar. La naturaleza es mucho más que eso, porque es esencialmente diversa y no binaria. Como dice en una entrevista a Atmos, “¿Qué hay en mi mochila? Mi kit de maquillaje, mis tacones altos de seis pulgadas, mi feminidad, mi masculinidad, mi todo lo demás.”

@pattiegonia

El senderismo en Oregon, según Pattie Gonia. ©Wyn Wiley