Taller de fanzine de la jornada Naturalezas Diversas.

Naturalezas Diversas: celebrando la diversidad durante una jornada interseccional

En el activismo, la interseccionalidad se instala para remendar las injusticias socioambientales y valorar las voces marginadas. Para conocerlas, el pasado viernes 11, junto a Patagonia, como Endémico, levantamos una jornada de caminatas, talleres, música y conversaciones en torno al medioambiente. Así se vivió “Naturalezas Diversas” en Santiago.

Como pocos días de primavera, a las 10 de la mañana las nubes se habían tomado el cielo. A la altura del metro Salvador, justo frente al río, un grupo de 14 personas se agolpaba en la baranda que separa la calle del Mapocho, para mirar el cotidiano color grisáceo del cauce. Atentos, no se percataron del efecto que creaban entre los demás transeúntes. 

“Cuando hay gente que mira el río, hay gente que mira el río. Los humanos somos seres de repetición”, dijo entonces la artista y mediadora, Valún Paillaleve, al comenzar su caminata: Resistencias de Agua Viva. Su taller consistía, justamente, en apreciar el Mapocho desde sus historias, sus plantas y sus colores. “En tiempos de crisis climática, el mundo requiere de nuevas sensibilidades. Estas son formas de encontrarnos”, dijo Valún, una vez terminada su actividad. 

Con esa reflexión, partía el primer taller de “Naturalezas Diversas” cuya finalidad era hacer converger las voces que han sido oprimidas por quienes también degradan los ecosistemas, en la lógica de ambientalismo interseccional de Leah Thomas.  Según la autora: “La defensa ambiental que ignora la justicia social es dañina e incompleta”, y desde ahí quisimos crear una instancia para conocer a quienes, desde los márgenes de Chile, luchan por cuidar la naturaleza y sus personas.

Caminata Resistencias de Agua Viva, en torno al río Mapocho. ©Marcos Muñoz Cabello.

“Es importante ayudar a nombrar los problemas, porque como dice Kimberlé Crenshaw ‘si no hay un nombre para el problema, no podemos verlo, y si no lo podemos ver, no podemos resolverlo’, a propósito de la interseccionalidad”, dijo Sofía Rosa.

Entre sonidos y recortes

Una observación de aves pero sin mirar. Así partía la segunda actividad de Naturalezas Diversas, encabezada por el guía de ecoturismo, Felipe Tapia. El plan, hasta entonces, era simple: congregar en el Parque Bicentenario a personas, videntes o no, para comenzar una actividad de apreciación de especies, creada para personas con discapacidad visual llamada Aves para Tod@s. La experiencia comenzó con una clase que detallaba los distintos cantos, para luego dar paso a la caminata donde lo esencial consistía en oír y sentir. 

“En total, identificamos cerca de 150 individuos de 16 especies diferentes. Las que más llamaron la atención fueron el zorzal, el chincol, los jilgueros y la rara, la favorita de todos”, contaba Felipe Tapia. “Con esto las personas tienen la oportunidad de conocer aquellas aves que escucharon toda su vida, desde el alba hasta el atardecer. Ahora ellos también pueden conocer las aves y ayudar a su conservación”.

Terminada esta actividad, Naturalezas Diversas se trasladó a las inmediaciones de la Librería Verde para desplegar el Taller de Fanzine: Diversidad en la Naturaleza, dirigido por el Colectivo Visitante, de artes gráficas y audiovisuales. Durante el taller, la bióloga Violeta Sotomayor –parte del colectivo–, abordó la inexistencia del concepto de individuo en la biología. Entendiendo que la naturaleza se compone de ecosistemas simbióticos múltiples, compuestos por distintas formas de vida. Desde ahí, la invitación se abría a profundizar esta diferencia a través del collage y el fanzine,  que son materialidades versátiles, que permiten recoger la diversidad de miradas, sin excepción. 

Según Paola Gómez, diseñadora y una de las profesoras del taller, el desglose de la actividad resultó muy abierto y algunos decidieron escribir, dibujar o tan solo usar imágenes.

“Partimos con la pregunta: ¿Cuál es tu ecosistema?. La gente partió con entusiasmo plegando las técnicas. Fueron muy receptivos con la información y la temática a desarrollar, y  el resultado fue increíble”, añadió. 

Mientras que, Mariana Remis, otra de las profesoras, sostuvo que hubo mucha comodidad respecto a la reflexión planteada. “Se sintió muy natural la idea de que fuéramos ecosistemas y eso se notó en lo expresivo de los trabajos. Todes plantearon muy bellas reflexiones en sus collages, que funcionó como una especie de desahogo respecto a los conceptos que siempre nos han impuesto”.

Resultados del taller de Fanzine Diversidad en la Naturaleza. ©Marcos Muñoz Cabello.

Ambientalismo interseccional

Con una sala repleta, a las 7 de la tarde, se desplegaba el plato fuerte de la jornada: el conversatorio y cierre de la jornada, con un cóctel y la música de Fuente de Barro, en las inmediaciones del Centro Leñería de Providencia.

La escritora e investigadora, Sofía Rosa, encargada de moderar y abrir la conversación, entonces comentaba: “Es importante ayudar a nombrar los problemas, porque como dice Kimberlé Crenshaw ‘si no hay un nombre para el problema, no podemos verlo, y si no lo podemos ver, no podemos resolverlo’, a propósito de la interseccionalidad”. 

Así, presentaba a las voces que componían el panel: Ámbar García, voluntaria la red internacional de jóvenes activistas ambientales latinoamericanas, Latinas For Climate; Yanka Millapán, feminista y co-fundadora de la Red de Mujeres Mapuche, y Jacinto Peliowski, investigador que ha centrado su trabajo en las diversas expresiones y representaciones de las corporalidades transgénero. Tres personajes que fueron abordando diversas preguntas dirigidas a lo largo de una hora de conversación.

Entre lo discutido, Ámbar García, describió las fuertes amenazas que viven las mujeres en tiempos de crisis climática. “Somos las más afectadas. Tenemos menos acceso a la educación, más pobreza, somos las encargadas de los cuidados. Por eso se necesita activismo femenino y levantar voces de las mujeres, porque el capitalismo afecta nuestros cuerpos”, comentó.

Yanka Millapán, entre otras cosas, sostuvo que las demandas de los pueblos originarios representan las voces de aquellos que siempre han existido. Y detalló: “Cuando llega la colonización, se nos impuso otra forma de ver la vida, haciéndonos ver atrasados y salvajes. Se pensaba que no comprendemos bien el funcionamiento de las cosas, pero era una manera de ver la vida de forma equilibrada. El liberalismo afecta este equilibrio y afecta a la gente pobre. Por eso necesitamos interseccionalidad”.

Jacinto Peliowski exponiendo en el Espacio Leñería de Providencia. ©Marcos Muñoz Cabello.

Mientras que Jacinto Peliowski, puso énfasis en las teorías de ecología queer, al decir que “la diversidad es algo esencial en la naturaleza. Ella no comprende fronteras y está hecha de grises, de entre medios”. Así, el investigador nos invitó a volver a lo planteado por la teórica del ambientalismo interseccional, Leah Thomas al detallar que el prisma interseccional no solamente ilumina dinámicas de explotación poco visibilizadas, sino que también busca alternativas de luchas y resistencias. Era el final de la jornada y tras lo conversado y vivido, una frase de Jacinto se levantaba para darle sentido a la ocasión. “Todo en la naturaleza es biodiversa y es así como ella prospera”, concluyó el investigador al terminar el conversatorio.

De esta forma terminaba la jornada de talleres y discusiones interseccionales Naturalezas Diversas, para dar paso a la un espacio de conversaciones distendidas y música. A eso de las 8 de la noche, entonces, se dio paso a un cóctel, para luego pasar de lleno a una experiencia sensorial, liderada por los acordes y tonos fusión de folk y soul de la banda Fuente de Barro.