Excéntricos y al sur: cuando la creación se enraíza en los territorios

Fuera del centro. Ex-céntrico. Desde afuera. Desde otro lugar. Desde otra perspectiva. Desde ese borde comienza a escribirse esta historia. Con el sur como tierra fértil para el cultivo de conocimientos y afectos, y también, como fuente de vida para la creación artística interdisciplinaria.

Hace un par de años atrás comenzó como un sueño, la idea de formar una red para la creación y la gestión cultural para las artes transdisciplinares en el sur de Chile. Un corredor impulsado por quienes habitan y activan movimientos culturales en las regiones más australes del país. La idea adquirió fuerza y fue dibujada por varias manos de artistas y gestores de organizaciones enraizadas en estos territorios. Agrupaciones culturales con experiencia en diálogos transdisciplinares entre artes, tecnologías, educación e identidades locales, y cuyas principales bases de acción se emplazan entre las regiones del Biobío y la de Magallanes, posibilitando el cultivo de la reflexión y el conocimiento situado con los pies puestos en el territorio. 

Liquenlab es uno de estos proyectos que posibilita el cultivo de la reflexión y el conocimiento situado con los pies puestos en el territorio. ©Liquenlab

Liquenlab en Punta Arenas, Memoria Austral en Coyhaique, Galería Barrios Bajos en Valdivia y Toda la Teoría del Universo en Concepción, son las organizaciones que hoy dan cuerpo y contenido a Surtopías, nombre escogido para esta red excéntrica de colaboración cultural e intercambio de saberes en el sur austral. La iniciativa colectiva pulsa la vinculación de organizaciones que trabajan en el campo artístico, y que, a través de la articulación y el compartir de experiencias, desean potenciar el desarrollo de nodos descentralizados en el territorio nacional, a través de la creación de instancias de transferencia de experiencias, tanto en el ámbito creativo como administrativo y de gestión.

Los diálogos que sentaron las bases para la formación de Surtopías hablaban de aventurarse en el desarrollo de otras sensibilidades, sensibilidades propias de la creación en estos territorios. “Cuando hablamos de excéntricos, nos referimos a fuera del centro, fuera de Santiago como capital, pero también excéntrico en la forma de relacionarnos, con y desde nuestros mismos territorios. Es una postura política. El horizonte es romper con las lógicas centralistas. Aportar otro movimiento. Incluso, sacar del centro a nuestros pensamientos y apelar a los afectos. Con todo esto, ya tenemos bastante ganado”, explica Nataniel Álvarez, codirector de Liquenlab, plataforma creativa emplazada en la región de Magallanes y Antártica Chilena, que en su origen se inspira en la metáfora del liquen y su capacidad de simbiosis con otros agentes.

“Cuando hablamos de excéntricos, nos referimos a fuera del centro, fuera de Santiago como capital, pero también excéntrico en la forma de relacionarnos, con y desde nuestros mismos territorios” (Nataniel Álvarez, codirector de Liquenlab).

En 2022, Liquenlab acogió el primer encuentro de Surtopías, donde la propuesta de intercambio consistió en un devenir a paso lento por las periferias de Punta Arenas, deambulando en conjunto por barrios y calles que no suelen ser parte de las rutas turísticas de la ciudad. De este modo, se diseñaron derivas por espacios públicos en desuso o en encrucijada frente a los cambios surgidos en la zona, como consecuencia de las transformaciones urbanas. Y también, se escogieron rutas de cara al mar y al viento, para explorar diálogos horizontales y cotidianos con el entorno. De estas caminatas emanaron reflexiones sobre el habitar en el extremo sur, la vida en comunidad, la creación artística, la gestión cultural y la memoria de los cuerpos y los territorios, reconociendo en estas dimensiones historias comunes entre quienes integraron esta particular red de artistas.  

En tanto, durante este mes de mayo representantes de cada una de las organizaciones implicadas se dieron cita nuevamente en Liquenlab para la segunda reunión de trabajo de Corredor Surtopías, cuyos objetivos fueron visibilizar el trabajo de la red, generar acercamientos entre agentes culturales de Punta Arenas y el quehacer de cada grupo para crear jornadas de interacción entre los más jóvenes de esta comunidad y los artistas visitantes.

©Liquenlab
©Memoria Austral

“Creemos que es necesario pensar otras formas de hacer en colaboración y en red. Los territorios del sur son distintos entre sí, pero hay una homogeneidad en el sentido en cómo han funcionado las instituciones, los programas y las iniciativas en torno al arte. Cuando habitamos estos territorios, sabemos que cuesta mucho. A veces nos toca competir entre nosotras mismas, por eso es importante comenzar a pensar la gestión, la programación, la investigación y la creación desde esta otra mirada: una mirada en red y colaborativa, donde nos facilitemos procesos, donde nos agenciemos. No queremos estar siempre esperando a que nos diga la institución pública cómo es hacer arte”, detalló Elisa Figueroa, co-directora de Galería Barrios Bajos, de Valdivia, durante su participación en la jornada. 

En el encuentro, el equipo de artistas valoró la posibilidad de reflexionar en torno a sus prácticas y experiencias, más allá de la producción de artes. Así como también analizaron las formas en que el centralismo que se vive a nivel nacional, se percibe igualmente a escala de capitales regionales, por tanto, la necesidad de incorporar las lógicas de reflexión excéntrica aplica de la misma manera a estos contextos locales.

Esta red de colaboración meridional, que además aspira a estimular la movilidad de agentes comunes, también tiene en común el deseo de manifestarse como un gesto político frente al histórico problema del centralismo en Chile.

TTU es un colectivo de agentes transdisciplinares concentrado en fomentar el intercambio de conocimientos, prácticas y experiencias en torno a las artes y tecnologías. ©Toda la Teoría del Universo

Los colectivos que componen Surtopías

La diversidad de quienes componen el corredor Surtopías es parte de su riqueza. Sin embargo, ¿cómo operan estas organizaciones en sus ecosistemas culturales? 

Toda la Teoría del Universo (TTU) es un colectivo de agentes transdisciplinares concentrado en fomentar el intercambio de conocimientos, prácticas y experiencias en torno a las artes y tecnologías en Biobío y Latinoamérica. Esto lo hacen a través de instancias de programación de contenidos artísticos priorizando las artes vivas, el sonido, la visualidad, pasando por lo medial, la electrónica, lo neo-ancestral y lo digital. Lo anterior, tratando de comprender los desarrollos culturales de los distintos territorios, a través de un diálogo abierto. 

Galería Barrios Bajos hoy figura como emblema de autogestión vecinal en el imaginario local. Con perspectiva política y pedagógica, busca abrir el diálogo entre el arte y la comunidad con vinculación a su territorio específico, promover la investigación y experimentación conjunta entre artistas y la comunidad en general, difundir nuevas manifestaciones artísticas y facilitar la articulación de agentes de las artes visuales al sur de Chile.

Memoria Austral es una corporación que trabaja para crear, estudiar, asesorar, estimular, promover y coordinar iniciativas destinadas al fomento, rescate, conservación, investigación, puesta en valor y difusión del patrimonio cultural de la Región de Aysén en pos de la salvaguarda de la identidad regional.

Liquenlab es una plataforma creativa y un laboratorio de investigación territorial emplazado en Punta Arenas, con extensiones en Puerto Natales, Puerto Williams y Porvenir, que busca impulsar proyectos de creación contemporánea, propiciando la relación entre arte, ciencia y naturaleza, utilizando las nuevas tecnologías como medio exploratorio y expresivo, desde un enfoque ecológico, feminista y anticolonial.

TTU, Galería Barrios Bajos, Liquenlab y Memoria Austral son los colectivos que componen Surtopías. ©Surtopías

Imagen de portada: ©Galería Barrios Bajos