Durante el año 2010 el Golfo de México fue víctima de un catastrófico derrame de Petróleo denominado Deepwater Horizon, hecho que provocó la contaminación de la costa de varios estados, incluyendo Alabama, Florida, Luisiana, Misisipi y Texas. Hoy se considera que este derrame es el más grande que ha sucedido en la historia, que sigue contaminando actualmente, teniendo efectos devastadores para los ecosistemas, el turismo y la salud de las personas.
El diseñador británico Anthony Burrill fue contratado por la agencia creativa Happiness Brusells para crear un proyecto que generara fondos para la restauración de las costas de Louisiana. En conjunto idearon el diseño de un póster en beneficencia que sería impreso por el petróleo derramado. Sólo unos días después, el diseñador completó la serigrafía. Visitaron la costa de Grand Islae, Louisina y recogieron aceite del área con baldes a escondidas de la empresa BP, quien estaba vigilando la zona.
Anthony Burrill diseñó 200 láminas de edición limitada para ayudar a generar fondos para la Coalición de restauración de la costa de Louisiana, una fundación que se dedica a la restauración de hábitats costeros. El mensaje ¨Oil and Water don´t mix¨ (el aceite y el agua no se mezclan), es un llamado de conciencia acerca de los daños de la exploración petrolera marina.
Las láminas fueron vendidas a través de un sitio web, y la agencia creó un cortometraje acerca el proceso de creación.