Cerros islas: guardianes de historias antiguas, encuentros y celebraciones

El domingo 19 de octubre se celebró en todo Chile el Día de los Cerros, una iniciativa impulsada por la Fundación Cerros Isla, que busca acercar la naturaleza a las personas y fortalecer el vínculo de las comunidades urbanas con sus cerros. Esta jornada reunió más de cien actividades a lo largo del país. Entre las propuestas más originales destacó «Proyecto Pregunta en el Día de los Cerros», una experiencia artístico-sonora realizada por el colectivo Mil M2, junto a Fundación Estrella del Sur, que invitó a transformar el ascenso al cerro Renca en un acto de escucha, contemplación y reflexión colectiva.

Más de 80.000 personas celebraron este Día de los Cerros en todo Chile bajo el lema “Abriendo caminos a la naturaleza”. La jornada incluyó caminatas, talleres ambientales, actividades inclusivas y culturales en distintas localidades, organizadas por diversas entidades que actuaron como anfitrionas. “Estamos muy contentos, porque este año vimos muchas familias completas, personas mayores y grupos con discapacidad disfrutando de la naturaleza y viviendo el verdadero espíritu del Día de los Cerros”, comentó Fernanda Ruiz, directora ejecutiva de la Fundación Cerros Isla.

©Martín Sepulveda

Proyecto Pregunta: el dispositivo sonoro

Domingo 19 de octubre, 10:30 de la mañana. Desde el punto de encuentro en las faldas del cerro Renca comenzó la primera de las tres caminatas programadas para el día. Mientras los asistentes llegaban, se les explicaba cómo acceder al material sonoro – compuesto por cuatro estaciones de ascenso– que los acompañaría durante el recorrido. Una vez reunidos, el grupo inició la caminata con la pieza sonora titulada “Bienvenida”. Al darle play, se escucha una voz femenina, que nos ofrece una breve introducción. Esta audioguía poética propone “un conocimiento sobre la importancia de los cerros como islas ecológicas, pero también que cada estación de escucha sea una ventana al cerro: un pequeño momento, un comentario, una cita, una canción”.

Esta experiencia formó parte de los que fué “Proyecto Pregunta en el Día de los Cerros”, una de las actividades más destacadas de la jornada. La propuesta, realizada por el colectivo Mil M2 en colaboración con la Fundación Estrella del Sur, consistió en tres ascensos al cerro Renca, durante los cuales los participantes escucharon una obra sonora dirigida por Trinidad Piriz y Luciano Correa —quienes además aportaron sus propias voces—, y contó con la producción general de Andrés Soffia Vega. La obra fue creada especialmente a partir de las preguntas recopiladas previamente por Mil M2 mediante su dispositivo móvil Proyecto Pregunta, implementado con anterioridad en los cerros Calán, San Cristóbal y Renca.

Estructura metálica dónde se colocan las preguntas que se hace la gente. Esta fotografía fue tomada en cerro San Cristóbal. ©Proyecto Pregunta
©Martín Sepúlveda

El audio sintetiza, así, más de 700 preguntas, donde se refleja “los cerros como símbolo cultural, como agentes de salud física, mental y espiritual, como espacios de retiro, guardianes de historias antiguas, encuentros íntimos y celebraciones”, explica Isabel Guzmán, directora ejecutiva de la Fundación Estrella del Sur. En efecto, la pieza sonora invita a explorar estas geografías desde distintas perspectivas, combinando reflexión, sensibilidad y experiencia directa con el entorno natural.

Andrés Soffia, productor general de la obra, cuenta cómo “el dispositivo fundacional de Mil M2 —la estructura metálica donde se colocan las preguntas seleccionadas de la gente— mutó a un dispositivo sonoro”. Este nuevo formato incorpora el movimiento y la experiencia corporal del ascenso: “una caminata, un desgaste, una respiración, un oxígeno, acompañado por esta pieza que resumía los tres meses de trabajo previo, levantando información y manteniendo el vínculo con la gente”, relata. Isabel Guzmán, directora ejecutiva de la Fundación Estrella del Sur, por su parte, agrega: “quisimos aportar desde una vereda creativa, artística y reflexiva, para visibilizar los cerros isla de nuestra ciudad. Buscamos pensar lo ambiental desde lo sensible, desde la curiosidad, desde la pregunta”.

Mientras las personas llegaban al punto de encuentro, y antes de iniciar el primer ascenso, se llevó a cabo un espacio de mediación artística con personas en situación de discapacidad auditiva. La actividad, dirigida por el colectivo Mil M2 junto a un intérprete del municipio, tuvo lugar en la plaza principal del cerro Renca. Durante cuarenta minutos de quietud y diálogo, se abordaron preguntas como: ¿qué es Proyecto Pregunta?, ¿en qué consiste esta experiencia en particular? y ¿por qué preguntar? El encuentro incluyó además un ejercicio participativo y reflexivo del cual surgió una nueva interrogante para incorporar al dispositivo sonoro: ¿Cómo te sientes?

En las caminatas participaron mujeres y hombres de distintas edades, en su mayoría adultos de hasta cincuenta años. ©Martín Sepúlveda

“Así se dió inicio al Día de los Cerros con esta parte más inclusiva”, recuerda Isabel Guzmán, aludiendo a la emoción de ese comienzo compartido y de encuentro de diversidades. El segundo ascenso trajo consigo una sorpresa: una pareja de cóndores apareció en el cielo, planeando sobre el cerro como si acompañaran la caminata. El tercero, realizado a las cinco de la tarde, cerró la jornada con un manto de colores cálidos propios del atardecer y el soplo constante del viento dibujado en los pastos crecidos, que parecía despedir a los caminantes mientras descendían.

En las caminatas participaron mujeres y hombres de distintas edades, en su mayoría adultos de hasta cincuenta años. Muchos de ellos eran vecinos del sector, lo que aportó un fuerte componente patrimonial a la experiencia. A lo largo del recorrido surgieron conversaciones sobre las leyendas que rodean al cerro —como las de Don Emilio y el Cabeza de Chancho—, así como reflexiones en torno al rol de la institucionalidad pública en la gestión del lugar. La jornada resultó significativa, pues propuso, al mismo tiempo, una experiencia artística y un espacio de diálogo entre la historia del cerro y las problemáticas sociales de la comunidad. Como resume Isabel Guzmán, “se generó una especie de empatía con el cerro como un ser no humano”.

Durante el segundo ascenso, se observó a una pareja de cóndores apareció en el cielo. ©Martín Sepúlveda
En los últimos recorridos se sumaron algunas niñas y niños. ©Martín Sepúlveda

En los dos últimos recorridos también se sumaron algunas niñas y niños. “Pensamos que la pieza era muy teórica. Sin embargo, fue interesante ver que, a pesar de no estar pensada para infancias, hubo partes en que las y los más pequeños pudieron disfrutar”, comenta Isabel. En esta línea, Andrés agrega: “la actividad fue pensada con inscripción previa para un público muy específico, pero en el contexto de un espacio público natural, como el cerro, te encuentras con diversidades que este dispositivo no acogía directamente. Esto representa un desafío para el futuro. Nos dejó la pregunta de cómo poder llegar a más personas”. Isabel también menciona el desafío de proyectar esta pieza sonora como parte de la experiencia de cualquier visitante del Parque Metropolitano Cerros de Renca y de replicarla como una pieza de arte que acompaña en el ascenso de otros cerros de la ciudad. 

La propuesta logró entrelazar sensibilidad, arte y naturaleza en una experiencia poco común, que dejó en los participantes una huella profunda y abrió nuevas formas de relación con los cerros y con el paisaje urbano de Santiago. ¿Qué ocurre cuando el arte sale de las salas y se instala en el territorio? ¿Qué sucede cuando la obra no se contempla, sino que se camina, se respira y se escucha? Como señala Andrés, “entender el arte contemporáneo a través de una pieza sonora ya resulta poco habitual para la mayoría de las personas, y más aún vivirlo como acompañamiento de una experiencia física, tanto individual como colectiva, en el ascenso de un cerro”.

“Entender el arte contemporáneo a través de una pieza sonora ya resulta poco habitual para la mayoría de las personas, y más aún vivirlo como acompañamiento de una experiencia física, tanto individual como colectiva, en el ascenso de un cerro” (Andrés Soffia).

Pero la jornada no solo reveló una nueva manera de habitar el arte, sino también las necesidades y desafíos que persisten en torno a estos espacios naturales urbanos. Fernanda Ruiz cuenta que “más del 70% de las personas que participan en estas actividades son mujeres, entre ellas muchas dueñas de casa que suben con sus hijos o solas, además de cuidadoras”. Esa cifra habla de la urgencia de crear espacios más seguros, accesibles y amables para quienes cargan con tareas de cuidado o sienten que los cerros no les pertenecen. En este sentido, Fernanda enfatiza la importancia de resignificar estos ecosistemas: “la idea del Día de los Cerros busca romper las barreras simbólicas que aún existen en torno a estos lugares, muchas veces vistos como basurales o zonas peligrosas”.

Quizás sea justamente el arte, en su capacidad de transformar la mirada, el que permita desarmar esos imaginarios. Quizás caminar, escuchar y preguntar —todos gestos muy sencillos— sean las formas más directas de reconciliarnos con los cerros, de devolverles su lugar como territorios vivos dentro de la ciudad.

©Martín Sepúlveda

__

Quienes no pudieron participar del Proyecto Pregunta en el Día de los Cerros aún pueden vivir esta experiencia. El colectivo Mil M2, junto a Trinidad Piriz y Luciano Correa, han adaptado la obra para que pueda ser descargada y utilizada en cualquier cerro, permitiendo que cada caminata se transforme en un recorrido sonoro y reflexivo. Cada sonido y cada pregunta abren la posibilidad de un diálogo íntimo con el paisaje, con quienes caminan a nuestro lado y con los propios cerros isla. Basta elegir un cerro, ponerse los audífonos y dejarse guiar por las voces, las preguntas y el paisaje.

Escúchalo desde Youtube o desde Spotify.

©Martín Sepúlveda

Ficha técnica:

Obra realizada en el marco del Día de los Cerros 2025 y resultado de más de 700 preguntas ciudadanas levantadas por el Proyecto Pregunta en los cerros San Cristobal, Renca y Calán durante el mes de septiembre de 2025.

Un proyecto de Mil M2, apoyado por la Fundación Estrella del Sur.
Dirección sonora y voz: Trinidad Piriz.
Producción sonora y voz: Luciano Correa
Producción general: Andrés Soffia

Este trabajo fue posible gracias a la Fundación Cerros Isla, Parque Metropolitano Cerros de Renca, Parquemet, Parque Cerro Calán y Fundación Engel.